La trayectoria del viaje saliendo de Izamal, ya no fue el retorno a la carretera, yo temía que las carreteras vecinales resultaran por demás peligrosas, pero fue todo lo contrario, están sombreadas, pasan muy pocos autos, el paisaje es una delicia, en ocasiones casi un túnel de vegetación y se está mas cerca de los animales y plantas, pues en las carreteras de cuota hay escombro y material de relleno al rededor, y la selva no esta tan cerca, solo ves yerbas y pastizal a tu lado.
Otro aspecto positivo de los pequeños caminos es que tocan mas pueblitos y puedes sentir mas seguridad, pues acampar en la selva después de ver tantas serpientillas, alimañas y demás fauna silvestre, dejó de ser la gran solución, por lo que cambié de planes y desde entonces pretendo llegar a un pueblo cuando aun no oscurece y pedir permiso a los policias, o comisarios ejidales para poner mi tienda; !la sorpresa es la amabilidad y vocación de servicio de los policías!; en Tunkás me acompañó uno hasta la cancha de Softball y me encargó con su cuñado, quien ya quería prestarme una casa vacía, finalmente me sentí súper atendido, y dormí en el palco de la cancha, para poder salir sin contratiempos a la mañana siguiente.
Hasta ahora ha sido una constante que la gente me reciba muy bien y pretenda ayudarme cuando sabe que viajo en Bicla, en algunos lugares es la gente la que viene a ti y ofrece su apoyo, mientras que en las ciudades o pueblos mayores, la tienes que solicitar, y también es donde generalmente hay que pagar algo; normalmente te ubicas en canchas deportivas o plazuelas, la falta de baño es medio molesta, y cuando amanece y quieres hacer pis, surge el urgentísimo predicamento de cómo y en donde pues no puedes andar dando el show ni ensuciando el mundo, por lo que (y pasando a la sección "realismo escatológico- un mal necesario") recomiendo una botella grande de gatorade y una tienda de campaña en la que te puedas hincar dispuestas para tal fin, y la decisión de usarla al mas puro estilo taxista del D.F, (!guácala!) asi se evitan malos espectáculos que te pueden acarrear un problema en pequeñas comunidades y una demanda en ciudades . un poco de cloro al lavarlas resuelve malos olores y no te recomiendo pensar en desecharlas, pues llegas a pueblos donde ni siquiera hay tiendas, pero sí mas ojos sobre ti y la imposibilidad de dejar todo tu equipo mientras buscas -apretando los dientes- una orilla del pueblo o el milagro de una tienda oxxo con baño y café de grano.
Muchas publicaciones, mucha información, muchas fotos y antes todo muy mal gusto de poner a unas encueratrices-celulíticas-fofas vestidas de edecanes de cuarta junto a tus bellas fotos de pueblitos mexicanos...
ResponderEliminarTI-PI-CO de papá...
Qué bonitos se ven los lugares por los que has pasado, mucho colorido y casas bonitas, humedad al 500% y selva tropical... ¡TRRRRRÓPICO CALIENTE
MI QUERIDO NINO...!
Un saludote y sigue subiendo fotos... Ahora sube de tu parte del viaje con Catarrucas.
si mi hija, tienes razón, pero en este caso, no fué el típico de tu papá sino del "trópico..." pues el que tuvo el mal gusto de traer ese festejo al Bicentenario fué un "tropicalísimo presidente municipal" y solo consigno, con lo que (si lees los textos de corrido lo verás mas claro) quedo excento del delito que me señalas.
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